Cámaras de Seguridad


 ¿Qué es CCTV? ¿Cuáles son sus funciones y objetivos?

Un CCTV o circuito cerrado de televisión es una instalación de equipos conectados que generan un circuito de imágenes que solo puede ser visto por un grupo determinado de personas, estas se personalizan para adaptarse a las necesidades de cada cliente bien sean orientadas a la seguridad, vigilancia o mejora de servicio. 

¿Cómo funciona un CCTV?

Debido al desarrollo de nuevas tecnologías existen muchos tipos de CCTV, analógicas, digitales, con o sin cables que varían en su forma de operación, los equipos básicamente son los mismos, se requieren cámaras, lentes, cables y un monitor para visualizar las imágenes.
Las cámaras reciben las imágenes que son enviadas a los monitores por cable o vía inalámbrica donde son observados por personal calificado o vistos a distancia en tiempo real, a su vez son grabados en dispositivos o equipos dedicados para ello.

¿Para qué sirve un CCTV?

Dentro de las aplicaciones más comunes están las relacionadas con estándares de seguridad de distintos sectores, pueden ir desde aplicaciones sencillas, de tipo residencial, hasta aplicaciones complejas de vigilancia ciudadana.
Las aplicaciones de CCTV impactan áreas como la medicina, por ejemplo, pues hoy en día se implementan sistemas de CCTV en salas de cuidados intensivos o centros psiquiátricos y se usan para cirugías asistidas de forma remota.
En el sector productivo se emplean para supervisar líneas de producción y supervisión de medidas de variables como presión temperatura, flujo, etc., muy útiles para ingenieros de control de procesos, que no pueden estar en sitios remotos.
Por último, en el sector educativo el CCTV se ha usado para implementar centros de simulaciones y transmitir, en tiempo real, una o varias clases a distintos grupos de interés.

Tipos de CCTV

CCTV Analógico
La señal de video analógica se produce tras convertir los cambios de la intensidad de la luz en señales eléctricas. En el interior de la cámara se hace un proceso de digitalización, pero antes de transmitirla la convierte, de nuevo, en imagen análoga, para que sea recibida por un monitor o grabador de video por medio de un conductor físico.
Las cámaras se conectan directamente al sistema de grabación o DVR, por medio de cable coaxial RG-59, RG-6 o RG-11 con malla de cobre y conector BNC. El más utilizado de los tres para esta aplicación es el RG-59.
La cantidad de cámaras está limitada al número de canales en el DVR y la distancia de transmisión por el calibre del cable. También existen medios inalámbricos para transmisión de video vía radio enlaces que se componen de un transmisor y un receptor, sin embargo estos medios actualmente no son los más usados, dado el creciente auge de transmisión inalámbrica de datos sobre protocolos de red.

CCTV IP
Para este tipo de sistemas, y al igual que en el caso analógico, las cámaras IP captan los cambios de la intensidad de la luz en señales eléctricas, después las digitaliza, las codifica sobre protocolo de redes Ethernet TCP/IP y las envía hacia el sistema de grabación en red NVR, o al sistema de administración de video.
Las cámaras IP pueden ser alimentadas en corriente y voltaje por medio del mismo conductor o cable de red UTP por medio de la tecnología PoE. La conexión de las cámaras se hace a través de un cable de UTP con conector RJ-45, y este cableado está limitado a un máximo de 100 metros.